Ahorras tiempo y energías, creas en ti un habito o costumbre y de esta manera te cuesta menos ponerte a estudiar, aumenta tu motivación pues al terminar tu horario diario de trabajo sentirás la satisfacción del deber cumplido y si racionalizas tu tiempo te ahorras los agobios.
Para planificar una sesión de estudio:
Procura tener un horario fijo de estudio, procura evitar los saltos ( un rato o una tarde y otro por la noche ) y introduce descansos para evitar la fatiga y la interferencia en la memoria entre los conocimientos de asignaturas diferentes
Ejemplo:
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